Bilingüismo y TDAH

La mayoría de estudios que indagan sobre el funcionamiento ejecutivo de los pacientes TDAH indican que estos pacientes muestran problemas con la memoria ejecutiva y con los ejercicios que requieren atención selectiva. También tienen un rendimiento disminuido en test en los que se requiere cambios de tarea, ya que necesitan un periodo de adaptación mayor a los nuevos entornos y retos. Este peor rendimiento en funciones ejecutivas es una de las principales razones por las cuales los niños y jóvenes con TDAH presentan dificultades de aprendizaje.

Por otro lado existen estudios que afirman que los niños bilingües tienen un mejor rendimiento que la media en los test de memoria, de atención selectiva y en los paradigmas de cambio de tarea. Ahora bien ¿qué pasaría con niños y jóvenes con TDAH y que son bilingües? ¿Se verían compensados o atenuados los déficits ejecutivos causados por el TDAH con la ventaja de ser bilingües? Un reciente estudio Israelí con 80 estudiantes universitarios parece indicar que no es esto así. Es más el bilingüismo a los niños y jóvenes con TDAH, lejos de ayudar, podría incluso acentuar estos problemas, por lo menos en los estudiantes de este pequeño estudio con bilingües y no bilingües, Hebreo-Ruso con y sin TDAH.

Veamos en qué consisten las tareas y los resultados obtenidos. Se les realiza un test de Stroop numérico, que evalúa la capacidad de inhibición de información, es decir la capacidad de no dejarse llevar por inferencias ajenas a la tarea, y una tarea Simon de flechas (apretar una tecla cuando una flecha señala una dirección determinada). Las tareas cambiantes fueron el Trail Making Test, que mide la atención distribuida mediante una plantilla en la que se distribuyen números y letras y el sujeto tiene que ir uniendo alternativamente números y letras en sentido ascendente y siguiendo orden alfabético ( 1-A-2-B-3-C-…). Por último se les aplica un paradigma de de cambio de tareas.

Los participantes con TDAH rindieron peor que los controles, como era de esperar por estudios previos realizados, pero no apareció una ventaja bilingüe en la función ejecutiva. Es decir no hubo diferencias significativas entre los niños bilingües y los no bilingües en el rendimiento en esta batería de actividades en los jóvenes sin TDAH. Sin embargo los jóvenes con TDAH y bilingüismo sí que tuvieron rendimiento inferior a los TDAH no bilingües, lo que sorprendió a los investigadores que esperaban que ocurriese precisamente lo contrario.

Ante este sorprendente hallazgo, los autores concluyen que el bilingüismo podría llegar a ser una carga adicional para los adultos con TDAH, lo que lleva a la reducción de habilidades en la función ejecutiva. También proponen que se siga investigando sobre este tema con muestras mayores y con heterogeneidad en criterios para diagnosticar TDAH y descartar otras cuestiones que puedan influir y no tengan directamente que ver con el TDAH, como factores culturales o demográfico-sociales.

Por mi parte, y como profesional y madre de niña TDAH trilingüe español-holandés- inglés, puedo afirmar las dificultades añadidas que le ha supuesto manejar tres idiomas en el inicio de su etapa escolar, y que se van viendo mejoradas conforme avanza en primaria. Cuando alcance la edad universitaria estas dificultades deben estar largamente superadas y compensadas por el trabajo interior y el esfuerzo que mi campeona está realizando, porque en ciertas edades y nivel de estudios la constancia y el empeño pueden más que una funciones ejecutivas superiores a la media.

Así que ánimo padres y madres de niños con TDAH, ¡¡todo el esfuerzo tiene recompensas!!